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Blog-Aula de Jose Mari Balsalobre (Investigatia)

GINKGO BILOBA

GINKGO BILOBA
Para iniciar la “REBOTICA ECOLÓGICA” aprovecho estas fotografías que un amigo me ha enviado desde Hamamatsu (Japón). En ellas podemos disfrutar de la imagen de una calle adornada con ejemplares arbóreos de Ginkgo biloba.
Esta especie vegetal va a ser la protagonista de la primera ficha de nuestra Rebotica. En esta sección, presentaré periódicamente a los alumn@s la ficha técnica de una planta, y pediré en el plazo de una semana, que ellos busquen, completen y envíen información acerca de sus usos y propiedades  medicinales. Pasado ese plazo, no se admitirán trabajos y aparecerán publicados los seleccionados como mejores. Asimismo, se completará la ficha técnica con un resumen de los usos y propiedades medicinales de la especie en estudio.
Paseando por nuestra capital murciana, podemos encontrar un ejemplar similar en el jardín que hay enfrente del Hospital de la Cruz Roja. Este fósil viviente es fácilmente reconocible por su peculiar hoja en abanico.
FICHA TÉCNICA:
  • Nombre científico: Ginkgo biloba L.
  • Nombre común: Árbol sagrado, Árbol de las pagodas, Árbol de los 40 escudos.
  • Familia: Ginkgoaceae.
  • Origen: China. Llega a Europa en 1727.
  • Árbol caducifolio, muy longevo, de porte erguido en su juventud y paulatinamente se hace más extendido. Se trata de un árbol de crecimiento lento, pero que puede llegar a alcanzar una altitud de unos 300 metros y una anchura en el tronco de entre unos 60 o 150 cm.
  • Sus ramas son anchas y revestidas de hojas con dos lóbulos (de ahí su nombre biloba), que en verano presentan un color verde muy atractivo y en otoño parecen de oro. Hojas en forma de abanico, con largo peciolo, nerviación ahorquillada, algo carnosas y con una escotadura central que las divide en dos lóbulos.
  • Los ginkgos son árboles dioicos, es decir, los sexos se dan en ejemplares separados.
  • Botánicamente es una rareza. Se le llama "fósil viviente" por tratarse de uno de los vegetales que más tiempo ha permanecido sin cambios a través de las eras geológicas. Se han encontrado restos petrificados de más de 200 millones de años.

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